¿Te gustaría recibir actualizaciones de nuestros artículos en tu correo?

    Ocho consejos para arrancar el lunes

    El domingo por la tarde puede ser abrumador: ¡anticipa el fin del descanso y la llegada del “terrible” lunes! Si te ha pasado, eres parte de una abultada estadística, aunque esto no tiene por qué seguir así. Sigue leyendo ¡y descubre cómo cambiarle el significado a los lunes!

    Es domingo y estás viendo una de tus series favoritas, mientras te acurrucas en la cama o el sillón. De pronto empiezas a sentir un vacío en el estómago… nervios. Vienen a tu mente todas esas tareas que debes terminar antes de ir a dormir para empezar bien la semana, ¡y las que te esperan en cuanto abras la agenda de tu celular! “¿Tengo ropa limpia?”. “Mañana es la junta con el cliente”. “¿Qué voy a comer en la semana?”.

    El llamado síndrome del domingo es completamente real. Algunas personas, incluso, aseguran que entre domingo y lunes experimentan auténticas historias de terror. Entre las sensaciones que más comúnmente se presentan en esta transición al inicio de la semana están la tristeza, el cansancio y la desesperación; juntos, suelen provocar una baja significativa en nuestro rendimiento y productividad.

    En este artículo, de la revista Forbes, Alexander Kjerulf, conferencista experto en felicidad en la oficina, explica que, de acuerdo con diversos estudios de psicología y neurología, el estado emocional de una persona afecta de manera significativa la calidad de su trabajo; asimismo, que la depresión disminuye la motivación, la creatividad y el nivel de compromiso, aunado a que merma la capacidad de aprendizaje.

    El concepto, pues, no es invento nuestro. Se conoce como síndrome del domingo a una “sensación de vacío, malestar, angustia e irritabilidad”, señala Horacio Vommaro, director de Psiquiatría y Salud Mental del Instituto de Neurociencias Buenos Aires. ¿Y podría ser distinto? ¿Se pueden mejorar los lunes? Bien decía el fotógrafo Ansel Adams que no se necesita un nuevo año para hacer un cambio: “todo lo que se necesita es un lunes”. Y justo ahí estaría la clave.

    Se conoce como síndrome del domingo a una “sensación de vacío, malestar, angustia e irritabilidad”

    ¿Por qué el lunes suele ser el día más triste de la semana?

    Aunque la depresión y la ansiedad ante la llegada del lunes se deban a diversos factores, las expectativas que suelen acompañar a este día de la semana pueden estar, definitivamente, entre sus principales detonadores.

    ¿Cuántas tardes de domingo recuerdas haber pensado insistentemente en todo aquello que debes hacer o resolver una vez que inicie la semana? Presentaciones de proyectos, envíos, entregas, reuniones, trámites personales… cada una de esas tareas pendientes comienzan a desfilar por tu mente, interrumpiendo tu descanso del fin de semana y llevándote a pensar en todas las complicaciones que se aproximan; literalmente, esta situación te quita el sueño.

    Para Eleonora Koning, psicóloga especialista en mindfulness, vivir este tipo de situaciones es como andar en piloto automático, sin darle el sentido que corresponde a cada una de nuestras actividades. Ausentarte del momento para vivir en el futuro solo te provocará estrés e impedirá que disfrutes lo que estás haciendo en el presente: dejarás de conectar con tus seres queridos y hasta contigo.

    En cambio, estar más conscientes, en el presente, con atención plena hacia lo que estamos experimentando en nosotros y el entorno (incluso anotándolo, literalmente, en una nota en nuestro celular), nos permite identificar patrones y detonadores de la ansiedad. Solo así podremos trabajar en ella.

    ¿Cuántas tardes de domingo recuerdas haber estado pensando insistentemente en todo aquello que debes hacer o resolver una vez que inicie la semana?

    5-tips-para-arrancar-un-lunes_Plantilla-Imagenes-Banner-EXATEC

    Convierte el lunes en eso que estabas esperando

    Henry David Thoreau, un ferviente opositor a la esclavitud en Estados Unidos, dijo alguna vez: “El tiempo no es sino la corriente en la que estoy pescando”. Pero, ¿qué hacer para vivir realmente el presente? Aunque no es fácil desinstalar el síndrome del domingo de tu sistema, existen algunas prácticas que te permitirán llevar una vida más organizada y saludable, siempre y cuando logres hacer las cosas con disciplina y constancia. Como tips, inicia tu lunes:

    • Hidratándote bien

    Iniciar tu día con un vaso con agua es benéfico para tu organismo y puede impactar positivamente tu rendimiento. No esperes a tener sed. Si optas por bebidas energizantes, recuerda que, en exceso, agregan calorías innecesarias por el azúcar, y en muchas ocasiones también incluyen sustancias como la cafeína, cuyo exceso es perjudicial. Al final, ninguna bebida más simple, y beneficiosa, como el agua.

    • Ejercitándote

    Después del agua, realiza una rutina de ejercicios adecuada. El ejercicio físico ayuda a estar en el aquí y ahora, y funciona para reducir la ansiedad. Sigue algún canal en Youtube (mira el de Self, por ejemplo), pero procura realizar los ejercicios concentrado en cada parte de tu cuerpo.

    • Optimizando tu tiempo

    Enlista las actividades que debes ejecutar en la semana y prioriza. Puedes clasificarlas según la urgencia en corto, mediano y largo plazo. ¡Está bien dejar algunas cosas hasta el viernes! ¿Necesitas más consejos para optimizar tu tiempo al inicio de la semana? Mira esta nota.

    • Incluyendo actividades de recreación

    No todo es trabajo o estudio. Es muy importante que en tu agenda del lunes y de la semana también consideres actividades para divertirte. ¿Qué tal una tarde de juegos de mesa con pocos amigos terminando la jornada de trabajo? ¿Por qué esperar hasta el fin de semana?

    • Vigilando una dieta adecuada

    Así podrás recuperar los nutrientes que tu organismo consume en mayor medida cuando estás bajo estrés, y restablecerte de los excesos usuales de los fines de semana; en caso contrario, sentirás agotamiento, además de que aumentas las posibilidades de alteraciones orgánicas y funcionales. Y recuerda: cuando se trate de nutrición, siempre será mejor acudir con un profesional.

    • Planeando tu día la noche anterior

    En vez de dar vueltas en la cama pensando en todo lo que debes hacer al despertar, tómate quince o veinte minutos antes de dormir para revisar y organizar tus pendientes (vuelve al punto 3).

    • Manteniendo tus espacios ordenados

    La diseñadora de interiores Brenda Haines asegura que despertar en una casa en la que prevalece el caos nos predispone a iniciar mal el día; esto es porque, debido a la desorganización, podemos perder tiempo en cosas tan simples como buscar algo en el clóset, lo que podría provocar retardos y que terminemos de mal humor. Lo mismo sucede con otros espacios y otras actividades. ¡Así que manos a la obra y cada cosa en su lugar!

    • Evitando procrastinar

    Si tuviéramos una idea clara de todo el tiempo que perdemos postergando tareas, lo más probable es que dejaríamos de hacerlo. ¡El tiempo ganado a no hacer nada es tiempo de vida para más cosas que sí disfrutamos (o que necesitamos hacer)!

    Un día más, una oportunidad

    Bien visto, el lunes no tendría por qué ser el día más difícil de la semana. Es el primero de cinco o seis jornadas de posibilidades infinitas. Ahora que has entendido las razones por las que tiende a ser complicado arrancar una nueva semana, tienes el poder de cambiarlo. Mantener una buena actitud y organizarte son dos aspectos clave para que este día deje de ser un martirio. Crea nuevos hábitos, cámbiale el significado a los lunes ¡y de paso sácale una buena dosis de estrés a tu vida!

    FUENTES

    1.- ¿Cómo vencer la depresión del lunes? - Forbes

    2.- Síndrome de domingo: malestar de un día aquietado - Elle

    Comentarios