¿Te gustaría recibir actualizaciones de nuestros artículos en tu correo?

    El valor de tu experiencia (o lo que tú sabes y Google ignora)

    “Los años saben eso de lo que no se enteran los días”, afirma un proverbio chino (o árabe o mexicano, realmente no importa). Nada le resta sabiduría a esta afirmación. Lo mismo pasa con los adultos mayores, o seniors, que son fuente de conocimiento y experiencias únicas acumuladas que difícilmente encontraremos en los libros (o en Google).

    Pasas los 60 y la jubilación sobrevuela el horizonte. Los jóvenes transitan por los pasillos y se dirigen a ti con reverencia, agregando a tu nombre el antecedente don, doña, señor, señora o inge. La duda se instala: ¿cómo transmitir a estos jóvenes algo que no encontrarán en internet, antes de terminar tus años profesionalmente activos?

    En 2015, se estrenó El pasante de moda (The Intern), película que ya puedes ver en Netflix. Se trata de una comedia ligera dirigida por Nancy Meyers, que refleja la gran paradoja corporativa que ha surgido con el encuentro de dos de las generaciones más emblemáticas: los baby boomers y los millennials. O, de otra manera, el encuentro del mundo laboral análogo con el digital.

    En el filme, descubrimos cómo un exdirector de marketing, ya jubilado, es capaz de enseñar con paciencia y humildad a la joven Jules Oslen, CEO de una popular tienda de ropa en línea. ¿Cuál fue su estrategia para ganar su confianza? Primero la observa y admira su pasión. Después, detecta sus debilidades y fortalezas como líder. De forma empática, finalmente, la ayuda a organizarse para crecer y, sobre todo, la orienta para encontrar el balance entre sus intereses personales y laborales.

    La historia resulta atractiva, precisamente, porque su tesis no pasa de moda: la experiencia acumulada por otros es inigualable para lidiar con diversos temas de la vida, como la incertidumbre o lo inesperado. Como afirma Margaret Heffernan en su charla TED: ante la incapacidad de predecir el futuro, aprendemos más de las habilidades humanas desordenadas e impredecibles que de los algoritmos.

    margaret-heffernan-charla-ted-Plantilla-Imagenes-Banner-EXATECTED 

    Por ello, hoy apelamos al valor de tu experiencia. La reconocemos en tiempos en los que impera lo efímero, lo inmediato, y en que se apela a que la tecnología tiene (o debería tener) todas las respuestas. Según Heffernan (y nuestra propia experiencia), nadie sabe tanto como quien ha vivido: “La tecnología no puede ayudarte con tus sentimientos; solo acercarte a otros seres humanos te ayudará”.

    Seguro estarás de acuerdo con esto: en la vida real, las conversaciones inteligentes valen tanto como un mes estudiando en libros. Cuando interactuamos diariamente con otras personas en nuestros entornos laborales, por ejemplo, podemos abordar con mayor éxito los problemas corporativos típicos y personales, como el estrés, la autoconfianza, el liderazgo y el trabajo en equipo, y reconocer desde lo que otros hacen la importancia del orden y el reconocimiento.

    Tanto en la película mencionada como en la vida real, errando y experimentando juntos, en cabeza ajena, babyboomers y millennials se tornan más creativos y pueden desarrollar sus capacidades de adaptación, variación e invención. Te has preguntado ¿cómo podrías influir en las nuevas generaciones de tu empresa? Si volvieras a ella como asesor, ¿qué harías distinto?

    Las conversaciones inteligentes valen
    tanto como un mes estudiando en libros

     

    La fuerza de la experiencia personal en tu área

    Seguro te suena familiar esta situación: tu empresa contrata personas más jóvenes, recién egresados o aún alumnos, incluso, y las ideas que estos traen a equipos directivos integrados por personas de mayor edad irrumpe con enorme energía y, si tal vez no provoca desencuentros o conflictos, cambia en mucho la dinámica en que opera la organización. 

    Aunque la tendencia imaginable es que tras el choque generacional jóvenes o mayores se impongan sobre los otros, ya sea que estés por jubilarte o tengas a tu cargo personas de distinta edad, te invitamos a pensar: ¿qué tal si propones pronto un proyecto con equipos multigeneracionales para crear una auténtica racha disruptiva

    Los equipos multigeneracionales tienen todo para ganar: los mentores pueden guiar a los más jóvenes, y animarlos a experimentar con cierto conocimiento, y los mayores pueden arriesgarse con lo nuevo y aprender nuevas herramientas y dinámicas (tecnológicas y no tanto) que mejoran su vida y amplían sus perspectivas. Para todos, grandes y chicos, es un ganar-ganar.

    ¿Puede salir mal? Sí, y también puede salir muy bien. Tú y yo lo sabemos. La experiencia se gana a partir de lo que se vive, no solo de lo que se lee y mucho menos de lo que solo se cree, sin ser puesto a prueba. Esa es la diferencia entre la teoría y la práctica.  

    llaves-liderazgo - mentoria-Plantilla-Imagenes-Banner-EXATEC

    Cuando te jubilas, entonces, te llevas una valiosa llave que ha abierto muchas puertas y, como bien afirma otro proverbio chino (este sí): “Distintas cerraduras se pueden abrir con diferentes llaves”. ¿Qué te parecería legar un poco de lo que posees a tus colegas sucesores? Por eso puedes aportar experiencia y mostrar que el fracaso de hoy puede ser el éxito de mañana, algo que también construye resiliencia y dinamismo en quien aprende la lección al trabajar contigo.

    Para bien o para mal, Google pasó a ser más importante como fuente de consulta que la experiencia de los mayores. Esto solo es un síntoma de algo más grande: el avance tecnológico ha dejado a un lado el conocimiento generado por las personas a nuestro alrededor, con más trayectoria y con otras historias de vida. El error de esta tendencia salta a la vista: creer que un programa o plataforma sustituirá a las personas y su sabiduría es hasta peligroso. Los algoritmos de Google, por ejemplo, no entienden del corazón como toda la sensibilidad acumulada por un montón de experiencias de vida.

    El gran experimento de lo inesperado

    Quienes pasamos de los 50 sabemos que las situaciones que se enfrentan en el día a día laboral no siempre se pueden resolver con información de internet. Y eso es precisamente lo que podemos mostrarles a las nuevas generaciones: cómo ser más empáticos, creativos y resilientes. Podemos contar nuestra historia, que es única y está llena de experiencias de las que se puede extraer un aprendizaje. Así como no hay dos gotas de agua iguales en el mar, tampoco hay dos historias de vida idénticas. ¡Qué maravilla!

    En el péndulo que es la vida, podemos regresar a ser lo que siempre hemos sido: humanos que aprenden de otros humanos. Este es el experimento más increíble e inesperado. Si no eres 100% digital, no te angusties: sigues siendo 100% humano. Huyamos de aquello que afirma Heffernan (de 65 años de edad, por cierto): “cuando dejamos que la computadora piense por nosotros, perdemos la capacidad de imaginar”.

    Así como no hay dos gotas de agua iguales en el mar, tampoco hay dos historias de vida idénticas. ¡Qué maravilla!

    ¿Quién les dará imaginación, resiliencia y valentía a los nativos digitales? Esa es la invitación de hoy: si está en tus planes mantenerte activo en el mundo laboral, ya sea como asesor, mentor o maestro, conserva y fomenta tu capacidad para cultivar el pensamiento crítico y divergente, sin temor a utilizar la tecnología y los buscadores entre los buscadores.

    La experiencia de vida sigue siendo necesaria y muy valiosa para sacar adelante cualquier proyecto. Considera que cuanto más larga la cuerda, más alto volará la cometa. Tú puedes romper la barrera entre viejas y nuevas generaciones. Programas como Mentor EXATEC, sin ir más lejos que a tu alma mater, te ofrecen un espacio para ello.

    Sé ese gran consejero detrás de alumnos a punto de graduarse o integrantes de Líderes del Mañana. Como parte de ese acompañamiento, aconséjalos sobre el inicio de su vida profesional. Sé su llave para abrir mil cerraduras futuras: comparte con ellos tu experiencia en entrevistas de trabajo o diles cómo perfeccionar su perfil y, mejor aún, cómo pueden comenzar y llevar a cabo su propio emprendimiento. ¿Estás listo para contarles tu historia?

     

     

    FUENTES

    1.- The Intern. - Warner Bros. Pictures

    2.- The human skills we need in an unpredictable world. - Margaret Heffernan

    3.- Uncharted. - Margaret Heffernan

    4.- 5 generaciones en el mercado laboral. - American Express 

    5.- Choque generacional en el trabajo. - Daniel Gutierrez

    Comentarios