Las oportunidades te acechan, ¡reconócelas y aprovéchalas!

¿Cuántas veces te has quedado con la impresión de haber dejado ir una buena oportunidad de trabajo o de cualquier otro tipo? Despreocúpate, es algo común y nos ha ocurrido a todos, (además de que lo pasado, ya pasó). Pero eso no significa que no debas prepararte para saber detectar y aprovechar lo que venga. ¡Sobre eso estás a punto de leer!

En la película La La Land (2016), Mia (Emma Stone) es una aspirante a actriz que va a todas las audiciones posibles, pero nunca logra quedarse con un papel. Lejos de rendirse y abandonar su sueño, decide escribir un monólogo y hacer una puesta en escena. A la presentación, asiste un director de casting, quien ve talento en ella y decide invitarla a hacer una prueba que (spoiler alert) cambiará su vida.

Como dice una de las canciones de la película: “... Alguien en la multitud podría llevarte a donde quieres ir si estás listo para que te encuentren”, pero también podría ser una amiga, un desconocido con quien te toque compartir mesa en una reunión, por obra del azar, e incluso una publicación en LinkedIn o cualquier red social. El momento exacto para conseguir eso que tanto quieres puede estar en donde sea, pero... ¿Cómo identificarlo? Y sobre todo, ¿cómo sacarle provecho? ¿Podrías decir que estás preparada o preparado para conseguirlo?

Según el portal Significados, la palabra oportunidad viene del latín opportunitas, formada por op (antes) y portus (puerto), es decir, “delante del puerto”. En su origen, hacía referencia a las alternativas que tenía un marinero al pisar tierra y a la capacidad para aprovecharlas, dado que no sabía en cuánto tiempo volvería al mar.

Para saber identificar esos momentos que podrían llevarte a donde quieres llegar, la empresaria y escritora Marie Forleo recomienda tres cosas:

Tener claridad sobre tus metas a corto y mediano plazo.
Hacerte preguntas clave (filter questions) para identificar si realmente estás frente a una situación que te ayudará a alcanzar tus objetivos, en un marco de valores con el que concuerdes.
Compartir tus inquietudes sobre esa toma de esa decisión con quienes puedan aportarte buenas ideas.

Pero, ¿qué tal si, como Mia, dejamos de esperar la llegada de esas grandes oportunidades y buscamos la manera de crearlas? Una guía publicada en el blog de Seek, empresa australiana enfocada en la caza de talentos, sugiere que la proactividad es pieza clave para impulsar una carrera. De acuerdo con el artículo, adentrarnos en la profesión que nos apasiona, capacitarnos continuamente y acercarnos a personas que podrían darnos su apoyo son tres pasos que debemos dar para construir oportunidades para nuestro propio camino.

El momento exacto para conseguir eso que tanto quieres puede estar en donde sea, pero... ¿cómo identificarlo?

Abrirse camino en la desesperanza

Como consecuencia de la contingencia sanitaria, en 2020 la economía mexicana perdió 3.2% de su fuerza laboral formal, con 647 710 empleos menos que los registrados en 2019, esto de acuerdo con cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que pueden consultarse en esta publicación de Infobae.

En medio de este golpe económico, hubo, sin embargo, quienes supieron abrirse camino en la desesperanza. Andrea Ferrero y David Ayala-Alfonso son dos artistas de la CDMX que se encontraban en quiebra cuando empezaron a hornear galletas y pasteles para no caer en un total desánimo. Al ver que sus creaciones no estaban mal, subieron algunas fotos en Instagram. Un día llegó un mensaje, luego otro y otro más: sus seguidores preguntaban cómo podrían comprar una de sus creaciones.

De pronto, la oportunidad había surgido en un entorno desfavorable gracias a la emergencia del comercio electrónico y la popularidad del comercio local que trajo la pandemia: así nació Cuarentena Baking, una pastelería fantasma (aquí tienes más información sobre cocinas fantasma) que, a la vuelta de un año, tiene más de 37 000 seguidores en Instagram, alianzas con marcas y hasta un artículo en el New York Times que narra su historia.

Si Albert Einstein hubiera conocido la historia de Andrea y David, seguro no se habría sorprendido, pues la consideraría una consecuencia lógica de las circunstancias: “La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países”, reflexionó alguna vez. “En la crisis, nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias”.

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¿Las oportunidades son particularmente presencias resultantes de la calamidad? Seguro te ha ocurrido más de una vez que, frente a una situación adversa, algo ocurre en tu interior que saca lo mejor de ti: energía, ingenio, resistencia o cualquier otra cualidad clave para salir adelante, luego de haber creído que no lograrías superar ese momento crítico. Y ¿recuerdas cómo te sentiste algunas de esas veces en que lograste lo que te propusiste después de un mal tiempo?

Al final, los seres humanos hemos ido descubriendo que nuestros éxitos son poco consecuencia de la suerte y mucho resultado del trabajo de aprovechar lo oportuno.

En medio de este golpe económico, hubo quienes supieron abrirse camino en la desesperanza

¡No vaciles!

Pero, claro, las oportunidades no solo pueden presentarse en momentos difíciles, sino en cualquier momento de la vida, y es fundamental estar preparadas y preparados para sacarles provecho. Tais Pérez Domínguez, maestra en psicología clínica, recomienda seis interesantes acciones para tomar en nuestras manos las oportunidades ya detectadas antes de que se desvanezcan, y aquí te las resumimos:

¡No vaciles! La duda puede ocasionar que esa puerta se cierre.
Asume más riesgos y no permitas que el miedo te paralice.
Busca formas de conocer a más personas y crecer tus redes. Un comentario en social media o anotarte a un taller sobre un tema de tu interés son formas de entrar en contacto con personas que podrían ofrecerte alguna nueva oportunidad.
Ten curiosidad e indaga sobre temas que te atraigan y, también, acerca de cómo funciona el mundo. Grandes ideas y relaciones surgen de preguntas resultantes de una actitud curiosa.
Presta atención a lo que quieres, así estarás alerta y podrás reaccionar cuando se presente una oportunidad.
No evadas el momento de tomar decisiones. Existe la posibilidad de que en retrospectiva no sean lo que imaginas, pero una mala decisión será mejor que permanecer inmovil, porque podrás aprender de ella.

Volviendo a La La Land, en la audición que transforma su vida, Mia canta una oda a los soñadores: “Un poco de locura es clave para darnos nuevos colores para ver”, dice la canción. ¿Y de qué está hecha esa locura? ¿Por qué no pensar que de curiosidad, audacia y un obstinado esfuerzo por alcanzar los objetivos? Si defines bien lo que quieres y te aseguras de añadir ese poco de locura, lo más probable es que llegues a buen puerto (como el marinero de la etimología de oportunidad). ¡¿Qué esperas para intentarlo?!