¿Ambiente tóxico en tu trabajo? Vulnéralo cuanto antes

En México, la mayoría de la población económicamente activa sufre estrés laboral, muchas veces por un ambiente de trabajo insano. Para darte tips para sobrellevarlo, el EXATEC Diego Hernández, especialista en el tema, nos comparte su visión.

Es común que en cualquier reunión con amigos salga el tema del trabajo. Es también común que la mayoría se refiera a él como algo pesaroso: escucharás (y quizá hablarás) de sobrecarga, exceso de presión en la toma de decisiones, jefes difíciles y, en general, de ser parte de un mal ambiente de trabajo, es decir, de un ambiente tóxico.

De acuerdo con un estudio realizado en septiembre de 2021 por la Asociación de Internet MX y OCCMundial, la pandemia de COVID-19 provocó que México se convirtiera en el país con mayor nivel de estrés laboral en el mundo. Mauricio Sauri, Gerente Regional Oriente/Sureste de OCCMundial, señaló en una entrevista para El Financiero que en 2019 el estrés laboral afectaba a más del 40% de los trabajadores en México, pero, después de año y medio de pandemia, la cifra se elevó a 60%. Otro hallazgo relevante de este mismo estudio, que involucró a casi 11,000 personas, es que la mitad de las empresas no realiza ninguna acción para reducir el estrés laboral.

Para el psicólogo y EXATEC Diego Hernández Huerta (MGP’21), especializado en liderazgo estratégico y management, uno de los principales problemas que enfrentan las organizaciones es no instaurar un ambiente de trabajo que dé el justo reconocimiento a su empleados, que impulse su desarrollo y, sobre todo, que los vea como seres humanos, no como piezas de un engranaje que alcanza metas de producción.

¿Cómo afecta la toxicidad laboral a la vulnerabilidad de los colaboradores? ¿Cómo prevenir ambientes laborales tóxicos? 

La pandemia de COVID-19 provocó que México se convirtiera en el país con mayor nivel de estrés laboral en el mundo

La vulnerabilidad nos une

Aunque no todos los problemas que alguien puede enfrentar en el trabajo derivan necesariamente de un ambiente tóxico, la realidad es que esta relación se presenta en la mayoría de los casos, tal como podemos ver en la siguiente lista de síntomas de toxicidad laboral que identifica OCCMundial, portal especialista en recursos humanos:

• Liderazgo negativo.

• Horarios irracionales.

• Hostigamiento.

• Trabajo en equipo desigual o inexistente.

• Falta de reconocimiento.

• Conjunción de varios perfiles opuestos en una sola persona.

• Rumores que perjudican a terceros.

• Acoso laboral o violencia.

• Comunicación deficiente.

• Ausencia de planes de carrera.

Para Diego Hernández, este tipo de problemas surgen y tienden a hacerse cada vez más grandes por una razón primordial: la falta de espacios, al interior de la organización, en los que se pueda hablar sobre temas personales, y en los que las y los colaboradores tengan permitido mostrarse vulnerables en el propio ambiente de trabajo.

De hecho, una recomendación que suele hacer a quienes tienen equipos a su cargo en los que se ha generado un ambiente tóxico es que empiecen ellos mismos a mostrar su vulnerabilidad. “Cuando un líder es capaz de reconocer y mostrar sus debilidades, sus temores, sus dudas, va a generar condiciones propicias para que se den este tipo de conversaciones humanas, lo que poco a poco empezará a cambiar el sistema de valores de la empresa. Esto se debe a que mostrarnos vulnerables da pauta a la fraternidad, a reconocer y validar también la vulnerabilidad de la otra persona; es como una puerta de entrada [a los demás]”.

Para concluir con la idea, Diego asegura que las promociones y el crecimiento laboral deben ir de la mano con resultados, sin duda, pero también con ese contacto con la parte humana: reconocer a quien ejercita su talento laboral, pero también brindarle espacios para que pueda expresar su cansancio o sus conflictos con su familia y sus amigos. La idea, a fin de cuentas, es que se propicie un crecimiento integral, lo que incluye las dimensiones moral-emocional y laboral-profesional, para que eso se traduzca en el acceso a mejores posiciones de trabajo.

Mostrarnos vulnerables da pauta a la fraternidad, a reconocer y validar también la vulnerabilidad de la otra persona

Cuando las personas no pueden ser personas

Diego es contundente al explicar la importancia de que exista esta visión integral en la filosofía de una empresa: “Cada empleado es más que su puesto de trabajo, pero si la empresa no le da lugar a la persona, sentirá que el ambiente laboral lo está haciendo menos. Esto da pauta al ‘ciclo de la desesperación’, que va desde que alguien inicia súper contenta o contento con un nuevo trabajo, pensando que va a cambiar el mundo, para luego empezar a sentirse desvalorado e iniciar un descenso por esta espiral. Empezará a jugar con los resultados, se arriesgará a hacer menos, a ver qué pasa, de repente se ausentará… este ciclo se manifiesta cuando las personas no pueden ser personas en sus espacios de trabajo y se van sintiendo oprimidas”.  

¿Y qué puede hacer quien está siendo víctima de este tipo de situaciones detonadas por un ambiente tóxico en su espacio de trabajo? “Puede ser algo tan sencillo como hablar con su jefe directo sobre cómo se siente y qué se podría hacer para que ese malestar desaparezca. Para humanizar un ambiente de trabajo, es necesario que alguien, generalmente quien está padeciendo una situación complicada, dé los primeros pasos: reconocer su vulnerabilidad, externarla e intentar generar acuerdos”, comenta el psicólogo.

Es importante tener en cuenta que no siempre será posible llegar a los acuerdos necesarios para sanear el ambiente de trabajo. Si este fuera el caso, la persona debe estar consciente de ello y evitar convertirse en una bomba de tiempo, que podría explotar de un día para otro. Si ha llegado el momento de renunciar, reconocerlo puede ser la clave del bienestar.

Cuando la persona trabajadora sienta que se está traicionando a ella misma, que su sistema de valores se está viendo comprometido y reconozca que su crecimiento laboral no se va a dar en esa línea, será mejor abandonar el proyecto y no seguir en un ambiente tóxico por inercia ni por temor a no encontrar otra opción laboral.  

Finalmente, si no se construyen ambientes laborales que den espacio a la vulnerabilidad, el costo último tendrá que ser asumido por la organización: “Hay un costo de oportunidad muy grande para las organizaciones al perder talento importante; gente que se va por no encontrar un lugar donde crecer, no solo en la parte laboral, sino en la parte humana”.

FUENTES

1. Señales para dejar un trabajo tóxico - Crehana 

2. ¿Cómo lidiar con un ambiente laboral tóxico? - Dinero en Imagen

3. ¿Por qué el ambiente tóxico en el trabajo te sigue a casa? - BBC News