¿Cómo comenzar el Año Nuevo de la mejor manera?

Año nuevo, ¿vida nueva? Tal vez sí, tal vez no. Lo que es un hecho es que este 2024 puedes perfeccionar la forma en la que planteas tus objetivos.

Cada vez que llega un nuevo año deseamos que comience lo mejor posible. Con ello en cuenta, en las siguientes líneas te compartiremos algunas estrategias que, además de ayudarte a cumplir tus metas, te permitirán iniciar este nuevo ciclo colmado de buena fortuna.

Primera clave: propósitos realizables

De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Scranton, solo el 8% de las personas cumplen sus propósitos de Año Nuevo. ¿Por qué? Casi siempre tiene que ver con una definición de objetivos demasiado difíciles de alcanzar o con la falta de estrategias para hacerlo.

Pensémoslo así: no se trata de llegar al punto final de una escalera con un único brinco espectacular; se trata, más bien, de elegir los escalones más convenientes para que, un paso a la vez, logremos un progreso consistente que nos lleve al lugar deseado.

Visto así, importan más los cómos que los qués; es decir, si tu objetivo, por ejemplo, es bajar de peso, es mucho más probable que lo logres si te propones bajar 10 kilos en 4 meses, yendo al gimnasio de lunes a jueves de 6 a 7 de la tarde, y visitando al nutriólogo dos veces al mes, que si solo te planteas bajar 10 kilos en 4 meses sin una estrategia más precisa.

Dicho en otras palabras: un propósito es un punto de referencia, mientras que la suma de tus avances inmediatos y específicos son la verdadera fuente de tu progreso. Otros ejemplos de propósitos realizables y sus puntos estratégicos son:

Ahorrar dinero: ¿cuánto deseas destinar a tu ahorro y con qué frecuencia?
Mejorar tu salud mental yendo a terapia: ¿cuándo empezarás y qué prioridad tendrá en tu rutina? También es fundamental definir objetivos con el apoyo de tu terapeuta.
Viajar a algún destino nuevo en México para tu cumpleaños: ¿cuál será tu presupuesto y cuándo empezarás a ahorrarlo?

"[...] no se trata de llegar al punto final de una escalera con un único brinco espectacular; se trata, más bien, de elegir los escalones más convenientes para […] un progreso consistente que nos lleve al lugar deseado."

Todo es cuestión de perspectiva… y de planeación

Imagina que te propones mejorar tu hábito de lectura. Puede ser tentador querer leer las más de mil páginas de Don Quijote de la Mancha, pero si no acostumbras leer, es probable que dejes el libro después de unas cuantas páginas y experimentes una frustración innecesaria. En su lugar, puedes hacer lo siguiente y mantener tu meta a flote:

Analiza: si quieres leer más, primero identifica el tipo de libros que te llaman la atención. En caso de que no acostumbres leer tan seguido, lo más conveniente es que antes te acerques a libros más digeribles para que, ya con el hábito fortalecido, asumas el reto de una obra más exigente.
Define: una vez que hayas elegido un libro, establece con un criterio sensato cuántas páginas tienes la disposición de leer y con qué frecuencia. Por ejemplo, con 10 páginas diarias lees un libro de 150 páginas en dos semanas. Así será más fácil cumplir tu propósito, evitar frustraciones y potenciar tu motivación.
Ejecuta: una vez definido tu plan, actúa. Cumple con la cantidad de páginas y la frecuencia que estableciste. Planteado así, alcanzar tu objetivo dependerá de tu constancia y, dado que estableciste pequeños pasos realizables, la probabilidad de que lo logres será más alta.
Ajusta: si llegaste a tu meta, ahora podrás pasar a un siguiente nivel y leer más u optar por una obra más compleja. Si no cumpliste tu propósito, simplemente modifica la cantidad de páginas o el tiempo de lectura para que tu plan de acción sea más realizable.

Es importante que sepas esto: los tropiezos son inevitables. No te exijas de más y dale el justo valor a esos traspiés para que te recuperes rápidamente y retomes el ritmo. También es vital que priorices metas. Tener muchos sueños es positivo, pero si tratamos de abordar todos sin un orden establecido es probable que no cumplamos ninguno. Mejor, establece una jerarquía y enfoca tu energía estratégicamente; esto te permitirá enriquecer tu vida a largo plazo.

Rituales para atraer la buena fortuna

En México, existen diversos rituales populares que, junto con tus propósitos de Año Nuevo, pueden ayudarte a comenzar el ciclo con una mentalidad positiva. Al menos, eso es lo que dicen las tradiciones. Conozcamos algunas de ellas:

Las 12 uvas: come una uva por cada campanada de la medianoche como símbolo de lo que deseas para cada mes del año.
Ropa para estrenar: empieza el año con ropa nueva para renovar el ánimo de cara al nuevo ciclo.
Ropa de colores: usa un color de prenda específico, según lo que quieras atraer para el año naciente. Por ejemplo, blanco para la armonía, rojo para el amor o amarillo para el dinero.
Sal con tus maletas: si quieres que el año esté lleno de viajes, da la vuelta a la cuadra con una maleta llena de ropa o paséala por todos los rincones de tu casa.
Barre o limpia tu casa: barre tu casa de adentro hacia afuera para deshacerte de lo negativo y hacer espacio para lo bueno que está por venir.

"[...] un propósito es un punto de referencia, mientras que la suma de tus avances inmediatos y específicos son la verdadera fuente de tu progreso."