El mundo ha evolucionado gracias a miles de descubrimientos e invenciones de quienes se mantienen en constante búsqueda de respuestas a las grandes interrogantes de la humanidad. De ahí la importancia de apoyar el desarrollo científico.
Los jóvenes son el presente y futuro de México: representan el 30% de la población, equivalente a poco más de treinta y siete millones de personas de entre doce y veintinueve años, dispuestos a conquistar el mundo. Más de veintinueve millones de alumnos iniciarán clases durante el ciclo escolar 2022-2023, de quienes solo cinco millones cursarán la educación superior, aproximadamente.
La relevancia de la educación
Administración de empresas, Derecho, comunicación, contabilidad y psicología, son las carreras profesionales más populares, con matrículas que superan los sesenta y cinco mil alumnos a nivel nacional. Y aunque los jóvenes de hoy ponen especial atención en leyes, estrategias de comunicación y salud mental, las carreras vinculadas con el conocimiento científico empiezan a cobrar relevancia en todo el mundo.
Las carreras STEM (por su acrónimo en inglés: Science, Technology, Engineering, and Math) son estudios profesionales relacionados con la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Algunas de las más populares en este sector son física, química, biotecnología, astrofísica, electrónica, informática y robótica.
Hasta 2018, solo el 7% de los egresados de educación superior en nuestro país habían cursado una carrera STEM; entre 2021 y 2022, sin embargo, los indicadores presentaron buenas noticias: se registró un incremento del 42% en mujeres egresadas de carreras pertenecientes a estas áreas, además de haberse reducido la brecha salarial en comparación con empleos de otros ámbitos.
Las condiciones han mejorado de forma sustancial, en comparación con lo que sucedía en el siglo anterior. Existe gran diversidad de carreras especializadas en rubros científicos y de innovación tecnológica, así como organismos dedicados a incentivar la participación y divulgación del conocimiento científico.
Para entender la relevancia de la educación relacionada con la tecnología y la ciencia en México basta mencionar que ocho de cada diez empleos mejor pagados se ubican en áreas STEM, según información de El Financiero. Otro dato que debe tomarse en cuenta es que, de acuerdo con proyecciones de la OCDE, para 2030, el 80% de los empleos tendrán que ver con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Cinco mexicanos talentosos
Aunque la innovación tecnológica y la ciencia en México no alcanzan los grandes titulares en medios de comunicación masivos, existen logros históricos que vale la pena conocer y reconocer:
- El químico Luis Ernesto Miramontes fue el inventor del primer anticonceptivo oral. En 2009, fue nombrado por la BBC como uno de los cinco investigadores más importantes de Latinoamérica.
- Guillermo González Camarena registró su patente del Sistema Tricromático Secuencial de Campos, que a la postre se convertiría en el Sistema Bicolor Simplificado, dando origen a la televisión a color.
- El trabajo de investigación de Rocío Ortiz, científica especializada en el estudio molecular de las enfermedades, ha generado grandes avances en las terapias para enfermedades cardiacas, así como para el cáncer de mama y cervicouterino.
- Uno de los científicos mexicanos más importantes fue el Premio Nobel de Química, Mario Molina, quien obtuvo este afamado galardón junto a Frank Sherwood y Paul Crutzen, por sus investigaciones sobre la disminución de la capa de ozono.
De acuerdo con proyecciones de la OCDE, para 2030, el 80% de los empleos tendrán que ver con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Organizaciones que fomentan la tecnología y la ciencia en México
La inversión para la tecnología y ciencia en México apenas representa el 0.5% del PIB, mientras que el porcentaje recomendado por el Banco Mundial es de 2%, y países como Israel y Finlandia llegan al 4%. Para incentivar el interés y crecimiento, existen diversas instituciones que se dedican a fomentar y apoyar estos rubros, al prestar especial atención en la educación científica infantil y la generación de proyectos alineados con los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU para el desarrollo sostenible.
A nivel gubernamental, la institución más importante es el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), cuya labor se enfoca en establecer políticas públicas relacionadas con las humanidades, ciencia, tecnología e innovación. Esta institución define y coordina estrategias de investigación científica, desarrollo e innovación tecnológica, además de liderar el Sistema de Centros Públicos de Investigación, conformado por veintiséis instituciones.
También existen asociaciones sin fines de lucro que promueven las áreas relacionadas a la ciencia y la tecnología. Tal es el caso de Movimiento STEM, dedicado a impulsar programas de educación científica y el talento en Latinoamérica. Movimiento STEM ofrece capacitaciones, divulgación, apoyo e inspiración para que los jóvenes sean partícipes de este cambio trascendental.
El apoyo hacia la ciencia y la tecnología también proviene de diversas instituciones académicas, como es el caso del Tecnológico de Monterrey, que lo hace por medio de la red de ex alumnos EXATEC. En 2021, fue creado el grupo interdisciplinario EXATEC STEAM, dedicado a impactar comunidades de niños y jóvenes por medio del conocimiento enfocado en estos campos, así como en las artes. Aquí, puedes conocer un poco más sobre esta asociación.
La inversión en tecnología y ciencia en México apenas representa el 0.5% del PIB.
Mexicanas y mexicanos en la ciencia
Ya decíamos que nuestro país es un semillero de talento STEM. Aquí algunas historias de éxito que ojalá te resulten inspiradoras:
Carmén Felix, científica de la NASA B
La ingeniera en Electrónica y Comunicaciones, egresada del Tecnológico de Monterrey, comenzó a laborar para la NASA en el 2010, cuando se unió al Centro de Investigación Ames, en donde participó en misiones análogas que simulaban las condiciones del planeta Marte. En 2011, fue parte del desarrollo de un traje espacial adecuado para las condiciones del planeta rojo. Su labor con la dependencia gubernamental espacial y de aeronáutica de los Estados Unidos de América continúa y, hoy, se consolida entre los científicos mexicanos más relevantes de nuestro país.
Gisela Ortiz León, primera en fotografiar un agujero negro
Estudió la carrera de Física en la UNAM y, a sus 35 años, formó parte del equipo que captó la primera fotografía del agujero negro Sagitario A, localizado en la parte central de la Vía Láctea. El logro de esta oaxaqueña sirve para conocer las características de un objeto que, hasta hace algunos años, era desconocido para los seres humanos, permitiendo así nuevas investigaciones.
Fernando Mier Hicks, creador de un simulador espacial para nanosatélites
El doctor en ingeniería espacial por el Instituto Tecnológico de Massachusetts desarrolló un simulador para que prototipos de nanosatélites experimentaran las condiciones del espacio exterior. El invento de este EXATEC permite verificar la funcionalidad de componentes electrónicos y sistemas de propulsión de los nanosatélites, un invento vital para el éxito de futuros emprendimientos espaciales.
Durante la pandemia de covid-19, identificamos la necesidad de apoyar a los científicos mexicanos con más recursos por parte de todas las instituciones, tanto públicas, como privadas. Acercarse a las nuevas generaciones es vital a fin de conseguir beneficios a nuestra salud, aprovechar los recursos naturales y comunicarnos, así como muchos otros aspectos relevantes para el ser humano. La construcción de un México innovador depende de todos. Participa de la comunidad científica y tecnológica de nuestro país.
FUENTES
Aportaciones de los mexicanos al mundo - Sin embargo
Educación media superior en México - Boletín SEP
Científicos mexicanos - Tec Review
Carreras STEM - Becas Santander
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