Blog EXATEC

Diferentes tipos de liderazgo: ¡adáptalos a tu esquema laboral!

Escrito por Relaciones con Egresados | 29/10/2021

Los tiempos han cambiado y las y los líderes también necesitan actualizarse en su estilo. Te contamos sobre los diferentes tipos de liderazgo para que tomes nota de las mejores cualidades y las ejerzas tanto al interior de una empresa como en tu vida personal.


Desde pequeños hemos sido bombardeados con ejemplos de malos liderazgos. En noticieros y redes nos enteramos de casos de corrupción de líderes políticos, y estudiantes filtran grabaciones de maestros o entrenadores que abusan de su autoridad. Esto lo hemos visto con cierta naturalidad hasta en el mundo de las caricaturas: ¿recuerdas cómo en Los Supersónicos el señor Júpiter siempre estaba enojado, explotaba a sus trabajadores y se la vivía gritando “¡Sónicoooo!”?

Aunque estamos habituados al jefe gruñón, en los últimos años se han dado grandes pasos en cuanto a gestión de equipos de trabajo y liderazgo. Antes se priorizaba la consecución de los resultados por encima del bienestar de los trabajadores, e incluso de la propia empresa.

Hoy, el concepto de liderazgo está en un proceso de redefinición, impulsado en gran parte por la crisis sanitaria que enfrentamos y que nos ha sensibilizado a estar preparados ante cambios drásticos e inesperados. Sin liderazgos, los últimos dieciocho meses de nuestra historia habrían sido mucho más difíciles.

Esto nos lleva justo a algunas de las principales cualidades del nuevo liderazgo: la inteligencia emocional y la capacidad de adaptación y resolución ante situaciones adversas. Hoy las organizaciones requieren líderes empáticos, más humanos y, sobre todo, con un mayor enfoque en las personas como parte del propósito de la compañía.

Y aunque no todos los procesos que siguen grandes empresas como Coca Cola o Google pueden implementarse por completo en un restaurante, en un despacho de abogados o en una agencia de marketing, sí podemos adaptar algunas buenas prácticas a los nuevos tiempos.

En los últimos años, se han dado grandes pasos en materia de gestión de equipos de trabajo y liderazgo

Los tipos de liderazgo que más se han fortalecido

Los estilos de liderazgo no necesariamente son completamente buenos o completamente malos; blancos o negros. Tienen características particulares, que pueden impactar para bien o para mal a una empresa y a una comunidad. El tema se ha teorizado hasta el cansancio para diseñar un formato ideal, pero la realidad es que la persona que mejor entiende las necesidades de una compañía o institución es aquella que vive el día a día y conoce a fondo las características de la organización.

Estos son algunos de los modelos de liderazgo históricamente más comunes. Notarás que cada uno tiene sus propias características; analizándolas, podrás advertir cuáles podrían adaptarse mejor a la organización de la cual formas parte, y particularmente a las épocas actuales. Ten en cuenta que no existen fórmulas mágicas; solo disciplina, trabajo comprometido y buenas prácticas permiten conseguir mejores resultados.

Liderazgo situacional: el caso de General Electric

Jack Welch, ex CEO de General Electric, enfocó su gestión en ser transparente, empoderar a sus colaboradores y compartir las tareas. Estaba convencido de que si un líder era la persona más inteligente de su equipo, algo andaba mal. Para medir la calidad de su servicio seguía tres variables: la satisfacción del cliente, la satisfacción de los empleados y el flujo de caja. 

Hoy por hoy, Welch es referido como ejemplo del líder situacional, un modelo creado por Paul Hersey y Ken Blanchard, que se presenta como alternativa viable ante las necesidades del siglo XXI. El liderazgo situacional aborda las situaciones o las tareas en función de los recursos que posee la empresa, particularmente de su recurso humano, tal como hizo el ex CEO de GE, considerado entre los estadounidenses más innovadores del siglo XX.

¿Cómo puedes ejercer tú un liderazgo situacional? La clave es que analices e identifiques el estilo de trabajo de cada colaborador para lograr que explote sus cualidades y sea lo más eficiente posible. Este líder modifica su estilo según las competencias y confianza de cada colaborador, así que puede integrar elementos de otros liderazgos (como democrático o transformacional), según lo requiera. 

Liderazgo autocrático: el estilo personal de Ridley Scott

¿Alguna vez viste Blade Runner (1982), el clásico filme de la ciencia ficción? ¿Y qué decir de Thelma & Louise (1991), referente temprano del movimiento feminista? Mencionemos una película más: Gladiador (2000), que en 2001 recibió cinco premios Oscar, incluyendo el de mejor película. Estas tres cintas fueron dirigidas por Ridley Scott, un cineasta británico con fama de ser excesivamente perfeccionista y controlador, y por lo mismo, un buen ejemplo de líder autocrático. 

Este tipo de liderazgo destaca entre los más comunes y tradicionales. Su principal característica es que el propietario o director es el único que tiene potestad para tomar las decisiones finales. Su objetivo es que toda la compañía tenga un rumbo establecido para conseguir resultados constantes, evitando que existan curvas prolongadas de bajo o alto rendimiento; así, los líderes garantizan el control de la institución (lo que pone en riesgo un liderazgo así en tiempos tan inciertos como los actuales, a considerar).

¿Cómo le ha ido a Scott siendo un líder de este estilo? Si juzgamos por la cantidad de reconocimientos que ha recibido por su obra, sería difícil decir que le ha ido mal (haz clic aquí para mayores referencias). Al final, ningún líder consigue nada en soledad. Tal vez la clave sea un equilibrio entre el liderazgo autocrático y el impulso empático de los equipos, ¿no? 

Liderazgo participativo: Gandhi y su hacer-comunidad

Si la India logró independizarse del Raj británico, fue en gran medida por el admirable liderazgo que ejerció Mahatma Gandhi. Su práctica de la resistencia pacífica y desobediencia civil se trató, por supuesto, de un ejercicio de liderazgo participativo (también llamado democrático), mediante el cual logró que millones de ciudadanos se unieran a la causa e hicieran posible lo que llegó a parecer solo un sueño.  

¿Cómo puedes ejercer un liderazgo participativo? Involucrando a tus colaboradores en la toma de decisiones, delegando asignaciones e impulsando el trabajo colaborativo. Piezas clave en este modelo son la retroalimentación, el diálogo y la participación activa.

Y aun cuando este modelo puede parecer el ideal (ya sabes, por aquello de lograr que el equipo se ponga la camiseta), hay que tomar en cuenta que no todas las personas son participativas ni se les debe obligar a ello. La realidad es que existen diferentes tipos de personalidades, y a todas se les debe impulsar de diferente manera. Además, al momento de algunas crisis, la inacción o el consenso probablemente no serán las primeras ni mejores opciones.

Liderazgo transformacional: ¿existiría tu iPhone sin él?

Mucho se ha escrito y hablado sobre Steve Jobs y su sobresaliente capacidad visionaria. También se ha utilizado muchas veces como referencia al hablar de liderazgo. Sin embargo, también es bien sabido que el fundador de Apple solía retar a su personal para que llevara al límite sus capacidades. La actitud de Jobs pudo fomentar una cultura del máximo esfuerzo, pero hay una línea muy delgada entre estimular y atosigar con la que es necesario extremar cuidados. 

Prácticas aparte, en sentido teórico, el liderazgo transformacional se enfoca en empoderar al equipo de trabajo. El liderazgo de este estilo alienta, motiva e inspira a los colaboradores a innovar y ser disruptivos para alcanzar el éxito. Este modelo tiene la intención de crear más líderes en las empresas, personas comprometidas con la organización y capaces de tomar decisiones correctas, aun en condiciones adversas. Sin duda, dejando de lado sus actitudes extremas, Jobs fue un líder audaz y apasionado por crear cosas únicas.

Muchos estilos, un objetivo

Alcanzar un liderazgo ideal para una empresa o proyecto es un trabajo de tiempo completo. Es necesario identificar los aspectos con los cuales podrás influir de manera más efectiva en el desempeño de tu equipo de trabajo. 

Para lograr este objetivo, toma en cuenta aspectos relevantes externos al entorno laboral, como metas personales, circunstancias familiares, fortalezas y debilidades de todos los involucrados (de nuevo, la pandemia ha sido exigente para todas las trabajadoras y trabajadores; no desestimes los aspectos contextuales al evaluar e impulsar el rendimiento de tu equipo). Conoce a las personas, empodéralas. Más allá del estilo que elijas de acuerdo a las circunstancias, siempre será fundamental considerar que trabajas con seres humanos con sus contextos e historias, ¡y que tu liderazgo debe llevarles a un mejor lugar junto con la organización!

FUENTES

1.- El efecto del liderazgo autocrático - La Voz de Houston

2.- El liderazgo democrático: una aproximación conceptual - Universidad de Especialidades Espíritu Santo

3.- Liderazgo transformacional - José Manuel Maraboto