Nuevos tiempos, nuevas definiciones. Si el éxito antes significaba riqueza económica, hoy significa generar bienestar para las y los demás.
Piensa en un líder que admires: mujer u hombre, persona famosa, alguien de tu vida... piensa en sus virtudes y en sus defectos. ¿Te gustaría que esa persona te guiara en algún ámbito en la actualidad?
Si tu respuesta fue negativa, tal vez su tipo de liderazgo no se alinee con tus necesidades actuales. En cambio, si tu respuesta fue afirmativa, es probable que esta persona posea cualidades que valoras en el presente. Para ahondar más en esta pregunta, aquí exploraremos qué es el liderazgo consciente, cuáles son sus características y diferencias con otros tipos de liderazgo y de qué manera impacta positivamente en el entorno profesional.
Actualmente existe una tendencia a cambiar el término “jefe” por “líder”. Esta evolución refleja las demandas del mundo profesional contemporáneo: rapidez, interconexión, sostenibilidad. El vertiginoso progreso tecnológico ha ampliado nuestras capacidades, pero también ha generado la necesidad de adaptarnos a nuevas formas de gestión. Este cambio no solo replantea las funciones de los roles directivos, también establece la necesidad de nuevos parámetros para medir el éxito en este nuevo contexto.
El liderazgo consciente es un enfoque que combina la conciencia personal y la responsabilidad social en la toma de decisiones. Prioriza la empatía y el bienestar con el fin de generar un ambiente de desarrollo inclusivo y saludable. Un líder consciente entiende el impacto de sus pensamientos y acciones en quienes le rodean, y además valora y fomenta la creatividad, la innovación y el crecimiento personal. Bajo este modelo de conexión humana, todo líder consciente piensa en sus equipos como aliados esenciales para el éxito, y extiende esta misma visión a todo tipo de colaboradores, clientes, proveedores, y a la comunidad en general.
Este tipo de liderazgo se basa en cuatro características clave:
Los cambios de nuestro presente no solo replantean las funciones de los roles directivos, sino que también establecen la necesidad de nuevos parámetros para medir el éxito.
¿En quién pensaste al inicio de este artículo? Reflexionar sobre el concepto de liderazgo permite notar que cada persona lidera de forma diferente en función de su personalidad, habilidades y objetivos. De acuerdo con el modelo de liderazgo del reconocido psicólogo Kurt Lewin, existen tres principales estilos:
La persona líder dictamina claramente qué se debe hacer, cuándo y cómo. El énfasis está en el control sobre las y los demás, por lo que hay una clara división entre líder y subordinados, además de que las decisiones se toman con poca o ninguna consideración de otras perspectivas. Es el estilo de liderazgo más extendido entre las organizaciones.
También conocido como estilo participativo, se considera que es el más efectivo debido a que la persona líder se involucra con el equipo en las actividades y considera sus opiniones, aunque las decisiones, en última instancia, suelen ser unilaterales. Los miembros subordinados, no obstante, tienden a sentir un mayor compromiso con los objetivos del grupo, ya que perciben un esfuerzo más colectivo.
En español, el término significa “dejar hacer”, y precisamente eso es lo que permite la persona líder: que sus subordinados tomen sus propias decisiones. De acuerdo con Lewin, suele ser útil cuando se trabaja con expertos, pero en general produce una baja productividad debido a la falta de complementariedad en los esfuerzos.
El liderazgo consciente es un enfoque que combina la conciencia personal y la responsabilidad social en la toma de decisiones.
El liderazgo consciente representa un cambio de juego significativo en la forma de hacer negocios. Ya que su base es el espíritu de servicio y el beneficio colectivo, redefine la riqueza más allá de lo económico para abarcar variables psicosociales y ambientales.
Una empresa consciente opera mediante una cultura organizacional ética y sostenible, con estructuras horizontales que fomentan la empatía y la atención como fuentes de energía. Esto permite generar mejores climas laborales, en donde existen espacios de diálogo y una mayor cohesión.
En la misma línea, se ha observado que las empresas que adoptan las prácticas del capitalismo consciente pueden aumentar hasta tres veces su rendimiento. De acuerdo con Raj Sisodia, a esto se suman otros importantes beneficios como:
Todo líder consciente piensa en sus equipos como aliados esenciales para el éxito, y extiende esta misma visión a la comunidad en general.
Más que un concepto, el liderazgo consciente es una necesidad en el entorno empresarial contemporáneo. Adoptar este enfoque permite mejorar tanto las organizaciones como la sociedad y el medio ambiente, con lo que se genera un impacto positivo para todas y todos.
Las y los líderes conscientes son nuestros guías hacia un mejor futuro. Como integrante de la comunidad EXATEC, tienes la posibilidad de conectar con más líderes conscientes de tu alma mater y participar en iniciativas como el Centro de Empresas Conscientes. ¡Súmate al cambio! Gracias a agentes transformacionales como tú, los desafíos de nuestro mundo se convierten en oportunidades para alcanzar el éxito.
Fuentes:
Los 3 estilos de liderazgo de Kurt Lewin
Ser un líder empático también es rentable: las enseñanzas del liderazgo consciente
A Former Skeptic Explains Why Conscious Capitalism Could Save The World